Costillas guisadas con vino a fuego lento

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Costillas guisadas con vino blanco a fuego lento

Costillas guisadas con vino a fuego lento

Receta fácil para hacer unas deliciosas costillas guisadas con vino blanco a fuego lento. Estas costillas las probamos en un restaurante y nos encanto. Con la ayuda del camarero obtuvimos algunas pistas sobre la receta y nos pusimos manos a la obra. Tras varias pruebas hemos logrado la receta y ya disfrutamos en casa de estas estupendas costillas guisadas con vino a fuego lento. Anímate a cocinar y pruébalas, te van a encantar.

Ingredientes para 3 ó 4 personas:

Elaboración Costillas guisadas con vino a fuego lento:

Corta las costillas y retira toda la grasa que puedas de la superficie.

Condimentar las costillas. Espolvorea abundante pimentón dulce por toda la superficie de las costillas, añade también pimienta negra. Pon una sartén a fuego medio alto con 2 cucharadas de aceite. Cuando esté caliente pon las costillas y déjalas unos 3 ó 4 minutos por cada lado hasta que se doren bien, quizás debas hacerlo en varias tandas por el tamaño de la sartén. El aceite de la sartén lo desechamos.

Guisar las costillas. Pon en una olla o una cacerola grande, todas las costillas ya doradas, añade el vino, agua, azúcar, sal, comino y los dientes de ajo enteros. Ponlo a fuego fuerte hasta que comience a hervir, seguido baja el fuego al mínimo y coloca una tapa. Déjalo cocer durante 2 horas y media, te podrás comer hasta los huesos de los suave que queda la carne.

*Te damos otra opción para la terminación. Una vez que las sacas del vino, puedes pasarlas de nuevo por la sartén a fuego fuerte 2 ó 3 minutos por lado. Así estarán crujientes por fuera y muy suaves en el interior.

Al servir píntalas con salsa barbacoa y podrás disfrutar de unas costillas con un sabor muy especial.